No sé cómo contar esto. Solo que tengo que hacerlo. No por mí, sino por los que necesitáis entender.
Tengo una enfermedad y es crónica, lo que no significa que siempre esté enferma. A veces tengo… ¿Cómo llamarlo? «Brotes» o recaídas.
Tengo depresión clínica crónica. Y he escuchado tantas tonterías en mi vida: los débiles se deprimen porque no saben afrontar los problemas. Los que tienen depresión es porque en realidad son muy fuertes y han vivido cosas muy duras. Memeces.
La depresión clínica tiene su origen en causas puramente físicas: las transmisiones de la serotonina no funcionan adecuadamente en nuestro cerebro y esto es porque el gen responsable de los neurotransmisores de la serotonina es diferente y menos efectivo en el caso de los enfermos de depresión clínica.
A mí me costó mucho entender esto. Ni qué decir a mi familia. Pero tras más de diez años de lucha, di con el profesional adecuado. Por favor, si queréis entender lo que es la depresión y cómo funciona, os invito a ver un documental de La2TVE:
Este documental es fundamental para todos los que estáis pasando por algo así y no termináis de comprender la enfermedad. Es clave para los que tenéis alguien en vuestro entorno que lo sufre, pero no sabéis cómo ayudarle. Lo primero es entender qué nos pasa y por qué.
Lo malo de la depresión es que, aunque tiene síntomas evidentes, se suelen confundir con otras cosas que no relacionamos con estar enfermo: dejadez, negatividad, cansancio, falta de autoestima, pensamientos dañinos… Nunca falta la persona que te dice que te animes, que no seas tan vago y que salgas de la cama, que te maquilles y te pongas bonita y pienses en positivo… ¿Tú le dirías esas cosas a una persona que tiene cáncer y no se puede levantar de la cama porque no tiene fuerzas? No, porque relacionas sus síntomas con que está enfermo.
Sé que muy pocos veréis el documental, son 45 minutos de vuestro tiempo y somos todos muy listos y lo sabemos todo… pero el 80% de los suicidios se cometen por depresión. Esta enfermedad mata. Y la gente tiene un desconocimiento brutal y absoluto al respecto.
No necesariamente tengo que haber sufrido un drama en mi vida para tener depresión, aunque por lo general siempre hay un detonante que hace que la enfermedad se manifieste. Y no, no siempre que tenga un drama en mi vida voy a tener una recaída y me voy a deprimir.
Cuando falleció mi padre hace tres años, mi familia estaba asustada porque creía que había recaído. Yo sabía que no. Solamente tenía una inmensa tristeza y un duelo que pasar, pero no reconocía los síntomas de la enfermedad más allá de esa tristeza natural en un momento así.
He llegado a conocer mi enfermedad y los síntomas. He llegado a vivir sin necesitar medicación. Pero estoy alerta, porque no sé si en algún momento de mi vida me volverá a suceder. La última vez había sido hace 8 años, pero el año pasado tuve de nuevo una pequeña recaída de la que ya me he recuperado.
Hay pacientes que pueden vivir como yo, medicándose solo en los periodos de recaídas, otros que necesitan medicarse de por vida. Y NO PASA NADA. Hay gente con hipertensión que se toma una pastilla diaria para regular sus niveles… pues esto igual. Hay que entender y normalizar. Y si la medicación no te funciona, cambia de psiquiatra, prueba otras. Pero no te rindas.
La depresión clínica tiene tratamiento y en casos leves y moderados se cura. Para siempre. Y te olvidas. No es mi caso, pero lo importante para mí es saber a lo que me enfrento y cómo hacerlo. Y que mi entorno lo entienda. Porque a veces ni yo soy capaz de reconocer los síntomas.
Aclaro lo de depresión clínica, porque sé que esto genera muchas dudas: se puede padecer una depresión y que ésta sea un síntoma provocado por una enfermedad (por ejemplo, hipotiroidismo, alcoholismo, etc) o por un trauma (un abuso, una agresión, una pérdida importante, una separación…). En esos casos hay que tratar la causa (el trauma o la enfermedad) para que desaparezca la depresión. La depresión clínica no es un síntoma, sino una enfermedad mental cuyo origen es puramente físico y se trata como tal, con medicación.
La primera vez tendría 15 años. No supieron diagnosticarme correctamente con depresión. Eso llevó a muchos años duros y una caída muy grave con 23. Ahí me diagnosticaron depresión, pero no me dieron el tratamiento adecuado y volví a recaer muy duramente a los 28. Y ahí ya sí. Por fin. Por fin di con un profesional que sabía lo que me pasaba y me lo pudo explicar.
Probamos con diferentes tratamientos, hasta que dimos con el que funcionaba. Me mediqué casi dos años después de estar ya bien, porque aunque te crees que estás bien, aún te estás curando. No se puede dejar la medicación sin más.
Después he vuelto a tener episodios, pero los he reconocido muy rápido y he vuelto a medicarme antes de que fuera a más. El último hace casi un año… y ojalá sea el último. Pero si no lo es… si poco a poco me sumo en una desgana inexplicable, si poco a poco pierdo mi alegría, mi energía para hacer cosas, me embarga el cansancio, me despierto en la madrugada envuelta en sudor, empiezo a tenerme muy poca estima y a pensar que nada vale la pena… Si eso pasa y yo no soy capaz de darme cuenta… ¿Sabes qué?
Que puede que mi salud e incluso mi vida dependa de ti, o de ti, o de ti… ¿Y cómo vas a ayudarme si no conoces lo que es y hace una depresión? ¿Vas a decirme que hace buen día, que ponga de mi parte y salga a pasear? ¿Que me anime? ¿Que valgo mucho? ¿Que la vida es bonita?
Me han dejado parejas estando con depresión. Un novio que tuve, después de 4 años de relación, porque «no sé cómo ayudarte y es lo mejor para ti». Otro porque directamente no era capaz de comprender la enfermedad y que son síntomas, que yo no soy así. «Me gustas cuando estás bien». Claro, hombre, yo no conozco a nadie normal que le guste ver a alguien enfermo. No perdí gran cosa.
Entiendo que esto es una enfermedad dura y que no todo el mundo tiene capacidad para ayudar a una persona enferma, pero si ni siquiera quiere hacer el esfuerzo por entender qué te pasa, aléjate de esa persona lo más posible y cuanto antes. No puede aportarte nada bueno a ti y quién sabe si a otras personas.
Por favor, ved el documental. Aunque sea a ratos. Tirad ya todos los mitos y tonterías que se dicen sobre la depresión. Son sólo 45 minutos y a cambio tal vez puedas salvar una vida. Nunca se sabe.
Y sí, se puede hacer vida normal, hay luz al final del túnel y, una vez que encuentras la salida del laberinto, aprendes a ser feliz y a disfrutar de la vida, que tiene muchas cosas que regalarnos.
Y para que conste, aunque sea una obviedad decirlo, no soy médico, no soy quién para decirte qué medicación tienes que tomar. Esto se basa únicamente en mi experiencia y conocimiento personal después de tantos años conviviendo con la enfermedad, superándola, documentándome, estudiando y hablando con muchos profesionales.
Lo único que puedo hacer con responsabilidad es aconsejarte que acudas a un psiquiatra si te encuentras con depresión o crees que puede ser tu problema. Y no me preguntéis por los psicólogos, mi experiencia con ellos en 30 años ha sido nefasta y me gusta mucho esa frase de: cuando no tengas nada bueno que decir sobre algo o alguien, mejor no digas nada.
Mucha fuerza. Sed felices, que se puede y se debe.
Ya sé que no tiene respuesta fácil , pero ¿cómo ayudar a una persona con depresión?
Hola, Ana. Desgraciadamente, no es una respuesta sencilla.
Mi consejo: no trivializar lo que le pasa ni cómo se siente, ni tampoco pedirle que sea positivo o que realice lo que nosotros consideramos que va a mejorar su estado de ánimo (salir, hacer deporte…) Esto no funciona y solo sirve para que la persona se sienta más incomprendida y frustrada.
¿Cómo ayudar? Escuchando, escuchando y escuchando, sin juzgar. Es muy difícil, lo sé. Pero es importante que esa persona sienta que tiene apoyos, gente que quiere ayudar y comprender qué le sucede.
Lo siguiente y lo más complicado, hacerle ver que está enferma. Los enfermos de depresión clínica no piensan que están enfermos. Piensan que la vida es una mierda, que nada vale la pena, que ellos son así y no sirven para nada y que, hagan lo que hagan, nada va a cambiar. Y piensan que están en lo cierto. Lo difícil es hacerles entender que simplemente tienen una enfermedad, que necesitan regular sus niveles de serotonina, al igual que una persona enferma de diabetes necesita regular sus niveles de azúcar. Que esos pensamientos y el resto de las cosas que le pasan, son solo síntomas de su enfermedad, que le engaña. Y que tiene tratamiento, aunque no siempre se da con el (ni con el profesional que nos sabe ayudar) a la primera.
Que el proceso hasta encontrarse bien y estable va a ser un camino largo, en el que no va a estar solo.
Hacer entender esto y convencerle para que salga de casa y acuda a un psiquiatra es lo más difícil. Puedes ayudarte viendo con esa persona vídeos como el que te he puesto, que le puedan hacer entender lo que le pasa.
Y no sé qué decirte más, Ana. Que te armes de paciencia y que entiendas que esa persona no es así, que es su enfermedad la que habla por ella y la que le obliga a actuar así. Sobre todo, tratar de normalizarlo todo. No tratarlo como un secreto, no hay nada de qué avergonzarse. Hablarlo con familiares y amigos, hacerles partícipes y conocedores de la situación. Quien no quiera, o no lo pueda entender, mejor que se aleje.
Mucha fuerza, de corazón te la envío.
Hola me acabas de aclarar muchas cosas yo tengo dos hermanos luchando con la depresión clínica y creo que puedo entenderlos mejor ahora gracias
Gracias a ti, Gabriela. No sabes la alegría que me da saber que he podido ayudar a alguien. Te deseo mucha suerte.